KULTURA ROCK EN VIVO - Reseña

Primero que nada comenzaré hablando de la arquitectura del Teatro La Ópera de Maracay, la cual puedo definir en dos palabras: UNA BELLEZA, al llegar al lugar, lo primero que nos recibió fue la imponente arquitectura del teatro con hermosa iluminación y los colores primarios que le daban a su fachada una llamativa imagen.

En cuanto al concierto en si, de maravillas, todos los allí presentes, diferentes generaciones reunidas, rock metaleros y vieja guardia de seguidores de los Beatles, Azucar, Cacao y Leche, disfrutamos todos y cada uno de los temas, la nota simpática la brindó el legendario Trino Mora con su tributo a Elvis Presley y su particular baile además de su accesibilidad con los fans que no dudaron en acudir a orillas del escenario para pedirles autógrafos, saludarlo y hasta cumplir su sueño de besar a su veterano ídolo.

Clásicos de Beatles como "Let It Be" entre muchos otros fueron los temas con los que Beatlemanía animó a la gente a corear, cosa que no les fue difícil porque el públicó coreo espontáneamente todas las canciones mientra en la pantalla de fondo veíamos viejas imagenes de The Beatles.

La nostalgia continuó con Azúcar, Cacao y Leche "La nueva generación", cuyo vocalista Carlos Quintero, hijo de Edgar Alexander, recordó a su padre quien está delicado de salud y quien una semana antes les entregara la banda a él y su hermano para que continuaran con ese legado. Fue un momento muy emotivo pero con palabras llenas de mucho orgullo del hijo hacia su padre. Previo a esta presentación, en la pantalla se proyectó la actuación de Edgar Alexander en el programa de tv, Kultura Rock y donde publicamente anunció su retiro de los escenarios.

Azúcar, Cacao y Leche, llamó a escena a TRINO MORA, como invitado especial, artista que hizo su show con mucho carisma robándose los aplausos de todos, para luego la banda terminar su actuación y cambiar la atmósfera musical de la nostalgia al poderoso Heavy Metal de la banda GILLMAN, un set donde PAUL GILLMAN interpretó clásicos de ARKANGEL, en cuya presentación pidió un aplauso para esta banda valenciana de la que él fue parte en sus inicios, y los felicitó por continuar en el ruedo.

Esta actuación del legendario PAUL GILLMAN y su banda desató la locura en el teatro, la pasividad de los rock metaleros presente se rompió y muchos, incluyéndome, dejamos los bellos y cómodos asientos para mover nuestras melenas al tiempo que se coreaban los temas en su totalidad.

Para su actuación, algunos presentes se fueron, sin embargo el numeroso público que se quedó seguía siendo muy bueno, fue impresionante cuando PAUL invitó a los que no se sentían bien escuchando su música a salir del recinto si lo deseaban diciendo que el que se sintiera obligado de estar allí puede retirarse sin problema, pero nadie se fue, incluso personas mayores, no metaleros, se quedaron y disfrutaron del concierto como el resto que si lo son.

Durante su actuación se le rindió tributo al recién desaparecido locutor ALFREDO ESCALANTE, así como a todos aquellos artistas del Rock y el Metal que han fallecido y han dejado huellas imborrables en la historia musical.

El momento tierno fue con la actuación de la pequeña niña hija de Vicente Arcuri que cantó el clásico tema "El Poeta" tema que todos los presentes corearon a todo pulmón mientras la niña dejó sin aliento a más de uno.

El concierto culminó con la misma buena vibra como comenzó. La atención por parte del protocolo dentro del teatro fue excelente y los de seguridad afuera del teatro hicieron su labor. Por mi parte puedo dar fe de ello, más sin embargo, hay otros que tuvieron problemas para entrar y de hecho no entraron como fue el caso de Felipe Arcuri y Giancarlo Picozzi, ámbos de la banda ARKANGEL, quienes llegaron después de la hora estipulada y según sus propias palabras expresadas fueron tratados de manera grosera y arbitraria por uno de los responsables de seguridad fuera del teatro, negándoles la entrada al lugar. Este hecho es el más notorio tratándose de dos reconocidas figuras públicas. Del resto todo transcurrió dentro de la más excelente normalidad.

Reseña Belén Vargas (Belva)
Fotos cortesía de Omar Hernandez